Analizan impactos de aranceles a exportaciones forestales de la Región
A fines de septiembre de este año, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un arancel especial del 10% a las importaciones forestales. Lo cual es visto con inquietud en Chile y especialmente en el Biobío, dada la importancia del rubro maderero que existe en la Región.
“Según el comunicado de la administración del presidente Donald Trump, el actual escenario de importaciones ha dejado de emplear la capacidad productiva de la industria forestal estadounidense, la que juega además un rol clave en las actividades propias del aparato militar dependiente de la Secretaría de Defensa—hoy Secretaría de Guerra”, aportó Andrés Acuña, director de Magíster en Economía Aplicada (MagEA-UBB) del Departamento de Economía y Finanzas de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Bío-Bío quien analizó en primer lugar la importancia del sector forestal en el Producto Interno Bruto de la Región en un contexto de revisar posibles efectos futuros en la economía regional de nuevos aranceles al sector exportador regional.
PIB regional
Más en detalle, el director de Magíster en Economía Aplicada (MagEA-UBB) señaló que de acuerdo con la información disponible en el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y el Banco Central, “las exportaciones del sector forestal desde la región del Biobío superaron los 3.600 millones de dólares (MMUS$) en 2024, cifra que equivale al 18,2% del Producto Interno Bruto (PIB) de nuestra región en términos nominales. A su vez, en el periodo enero-julio de 2025, las exportaciones forestales del Biobío superaron los MMUS$ 1,700. De la cifra anterior, más del 20% tuvo como destino Estados Unidos en 2024, mientras que el 37,3% de los envíos fueron a China en el mismo año. A julio de 2025, la participación de los envíos forestales a Estados Unidos y China alcanzó el 23% y 31,2%, respectivamente”.
En línea con lo indicado, Andrés Acuña destacó que las exportaciones del sector forestal hacia Estados Unidos “han perdido su importancia relativa de manera significativa desde 2023 a la fecha, año en que representaron el 37,5% de los envíos forestales. Esto puede ser una señal que el sector de la construcción estadounidense no está privilegiando los productos chilenos como insumos de mayor demanda, o bien, la estrategia de posicionamiento internacional del sector forestal local ha privilegiado la relación comercial con el Asia Pacífico, considerando que Corea del Sur fue el tercer destino en importancia en 2024”.
Acerca de qué implica para la economía regional un 10% más de aranceles, el profesor de la FACE de la UBB aportó un dato relevante para el análisis, al explicar que, de acuerdo con el comunicado emitido por la Casa Blanca el pasado 29 de septiembre, existen razones de peso en materia de seguridad nacional para limitar la importación de madera, madera aserrada y sus derivados según el informe preparado por la Secretaría de Comercio el 1 de julio del presente año.
En cuanto a eventuales proyecciones según el director de Magíster en Economía Aplicada (MagEA-UBB) casi la totalidad de las exportaciones forestales del Biobío se verán afectadas por la nueva medida arancelaria. “No obstante, sería cauto en pronosticar un escenario totalmente negativo para el sector forestal regional y nacional, ya que la Reserva Federal (Fed) ha explicitado un sesgo a la baja en la tasa de interés en lo que resta del año”.
“Independiente de lo anterior, lo que es clave, según mi perspectiva, en este escenario de incertidumbre arancelaria, es la disposición de las autoridades económicas y comerciales de nuestro país para involucrarse de manera proactiva a una negociación con la administración del presidente Donald Trump, en orden a fortalecer la relación comercial con uno de nuestros principales socios y retornar el valor de los aranceles a aquellos establecidos en el Tratado de Libre Comercio vigente entre ambas naciones”, dijo.
Sobre si puede reflejarse este aumento del arancel a las exportaciones forestales en un menor empleo para el sector en la zona, Andrés Acuña sopesó que, si la producción forestal del Biobío se redirige al Asia Pacífico, “no existirían grandes cambios en la dinámica del empleo del sector. No obstante, es importante señalar que el proceso de transformación productiva del sector hacia la incorporación de nuevas tecnologías vinculadas a la Industria 4.0 podría reducir su capacidad estructural de generar nuevos empleos en el mediano/largo plazo, lo que incrementaría, eventualmente, las tasas de desempleo de la industria manufacturera regional”
Bajo impacto
Por su parte, el Dr. José Ignacio Hernández, académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (FACEA) de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) manifestó que, sobre el impacto en sí, un alza en el 10%, considerando el contexto mundial en el que estamos hoy, es bastante bajo. “Si esto hubiera pasado 10 años atrás, un alza en 10% es bastante alto, pero considerando cómo está el contexto geopolítico, donde hay amenazas de incluso 100% o 150% de aranceles, el impacto relativo o la percepción, es que el alza puede ser contenida”.
Respecto de cómo se pueden medir los efectos de los nuevos aranceles, el académico de la FACEA de la UCSC expresó que se puede hacer “precisamente, con lo que se llama una matriz de insumo-producto, pero a nivel regional, donde nosotros podemos identificar cómo son las entradas y salidas de distintos productos hasta los productos terminados que podríamos exportar y conociendo cómo esto podría afectar los precios. La principal dificultad es saber cómo ese 10% se va a transferir a todos los productos intermedios o a las mismas materias primas, eso es algo un poco más complejo y hay bastante personas trabajando aquí en la Región en eso”.
Mala noticia
Renato Segura, economista de la Universidad Técnica Federico Santa María, explicó que la medida representa “una muy mala noticia para una región eminentemente forestal, cuyo modelo de negocios está orientado a la exportación de madera y derivados”.
Según el académico, “el mercado norteamericano representa del orden del 20% de las exportaciones forestales de Chile, siendo el segundo destino después de China, que contabiliza cerca del 40%”. En ese contexto, agrega que “el mayor efecto se concentrará en las pymes y las empresas de servicios forestales, quienes presentan mayor inelasticidad de la oferta exportadora frente a cambios de precios”.
Segura advierte que las grandes empresas del rubro, como Arauco o CMPC, tienen una estructura más resiliente gracias a su diversificación geográfica: “algunas de sus inversiones se han realizado en suelo norteamericano, lo que les permite mitigar parcialmente los impactos de los nuevos aranceles”. Sin embargo, remarca que “estos cambios pondrán un freno al dinamismo exportador hacia Estados Unidos, que durante 2025 se había situado en torno al 10%, con consecuencias difíciles de anticipar para una región que ya enfrenta un bajo desempeño en la industria manufacturera”.
Desde la Universidad de Concepción, el economista y director del Departamento de Economía, Claudio Parés, llamó a observar el fenómeno “con calma”. Si bien reconoció que el Biobío exporta cerca de 5 mil millones de dólares en productos forestales, recordó que “sólo entre un 20% y un 25% de esas exportaciones tienen como destino los Estados Unidos”.
“Podría haber un impacto en el precio internacional, pero éste debería ser menor al 10%. De hecho, la mayor parte del costo lo asumirán los consumidores norteamericanos, que podrían ver un alza en el precio interno de la madera”, explicó Parés.
A juicio del académico, “aunque se produzca una leve caída en la demanda estadounidense, las políticas proteccionistas suelen ir acompañadas de un impulso interno a la actividad económica del país del norte, lo que podría compensar parte de la baja inicial”.
Parés añadió que el impacto final podría verse moderado por la diversificación de destinos de exportación y la alta competitividad internacional del sector forestal chileno. “Nuestra industria es madura y sabrá adaptarse a los nuevos desafíos, aunque inevitablemente esto impondrá algunos costos de ajuste”, sostuvo.
Gremio
A través de una declaración pública, la Corporación Nacional de la Madera, Corma, indicó que ante la eventual imposición de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos a las exportaciones chilenas de madera, desde Corma queremos expresar nuestra profunda preocupación por el impacto que esta medida podría generar en un sector ya golpeado por una crisis estructural.
En el documento se lee además que más allá de lo bilateral, “estas medidas tendrán repercusiones globales, ya que alteran la asignación de aranceles entre distintos oferentes, con efectos en el mercado internacional de la madera. Esta incertidumbre, impactará a todo tipo de empresas, pero principalmente a las pequeñas y medianas, que no cuentan con las espaldas para sortear estas dificultades internacionales y además con un escenario de mercado interno decaído. Los 169 aserraderos formales cerrados en los últimos cinco años son una evidencia clara de la vulnerabilidad que enfrentan nuestras pequeñas y medianas empresas madereras”.
Otro punto contenido en la declaración señala que “el que ellos definan a la madera como un sector estratégico y un asunto de seguridad nacional, no es casual y es algo que Chile no debe pasar por alto. Nuestro país necesita mirar al sector forestal con la misma relevancia, entendiendo que -además del crecimiento económico y la generación de empleo- esta actividad es clave para la transición hacia una bioeconomía baja en carbono. Por ello resulta urgente fortalecer a las pymes, avanzar en políticas de fomento a la reforestación y promover nuevos usos de la madera, en construcción, biomateriales y bioproductos, en coherencia con los compromisos climáticos del país. Solo con visión de largo plazo podremos sostener a nuestras pymes y asegurar que la industria forestal siga siendo motor de empleo, innovación y desarrollo sostenible para el país”.
Fuente: Diario Concepción