Apicultura con raíces en el bosque: la historia de Patricio Quilodrán, Verónica Vidal y René Quilodrán
En un rincón del sur de Chile, donde el bosque nativo aún guarda su carácter silvestre y generoso, florece una historia marcada por la dedicación, el trabajo y la conexión con el entorno. Es la historia de Patricio Quilodrán, su esposa Verónica Vidal y su padre, René Quilodrán, una familia de apicultores que ha encontrado en el bosque no solo su sustento, sino también una manera de vivir en armonía con la naturaleza.
Desde Acoforag, queremos relevar estas historias que nos acercan al bosque y a quienes lo conocen desde adentro. Porque detrás de cada colmena, hay una familia que observa, respeta y aprende del entorno natural. En el caso de los Quilodrán-Vidal, la apicultura no es solo un oficio, es una forma de conexión con la vida silvestre, una tradición familiar que se transmite con el ejemplo y el trabajo diario.
René, el padre, fue quien dio los primeros pasos. Patricio creció viendo el trabajo con las abejas y comprendiendo desde niño la importancia del equilibrio ecológico. Hoy, junto a su esposa Verónica, mantienen viva esta actividad, que más allá de producir miel, ayuda a conservar los ecosistemas gracias a la polinización, clave para la biodiversidad.
Su historia es una muestra de cómo el manejo sustentable y respetuoso del bosque es posible cuando existe compromiso y conocimiento del territorio. Personas como ellos construyen día a día una cultura forestal más consciente, que no solo extrae del bosque, sino que dialoga con él.
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