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Renovales: Una oportunidad estratégica para el desarrollo forestal sustentable en Chile
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El presidente de Aprobosque, José Carter, puso en el centro del debate la relevancia de los bosques renovales como recurso clave para enfrentar la actual crisis de abastecimiento de madera en Chile. Con una mirada técnica y estratégica, Carter hizo un llamado en Conversando con la Acoforag a mirar con seriedad este tipo de bosque nativo de segunda generación, al que definió como una "oportunidad enorme" para el desarrollo de las pymes forestales.
"Siempre hay que partir por lo menos complejo, y los renovales representan eso", señaló Carter, destacando que estos bosques, que en su mayoría surgen tras incendios, abandonos de uso o fenómenos naturales, presentan una estructura menos diversa y más homogénea, lo que los hace más manejables técnicamente. “Son muy parecidos a un bosque plantado, porque los árboles tienen edades similares y especies dominantes, aunque han sido originados por la naturaleza y no por el hombre”, explicó.
Más de un millón de hectáreas con potencial
El dirigente gremial respaldó sus afirmaciones con una serie de estudios realizados desde 2003, incluyendo investigaciones propias y del Instituto Forestal (INFOR), que han demostrado el enorme potencial de los renovales en el sur del país. Un informe reciente del académico Patricio Toledo estimó que hay al menos un millón de hectáreas productivas de renovales de especies como el Roble-Raulí-Coigüe y el Coigüe-Raulí-Tepa, concentradas cerca de centros poblados y con buena conectividad, lo que facilita su manejo.
Para Carter, esta cifra es significativa: “Es como si toda la Región de Los Ríos estuviera cubierta por renovales. Es un recurso del que no podemos seguir haciendo vista gorda”.
Encadenamiento productivo: del bosque a la vivienda
Más allá del diagnóstico, Carter subrayó el valor de encadenar productivamente este recurso. “Si aplicamos un manejo sustentable, extrayendo solo el crecimiento anual de estos bosques, hablamos de 8 millones de metros cúbicos por año”, precisó. De esa cifra, 3,2 millones podrían destinarse a usos industriales, como madera cerrada, estructural o de alto valor.
Esa madera permitiría, por ejemplo, construir anualmente más de 110.000 viviendas de madera de 60 metros cuadrados, según sus estimaciones. Además, el 40% del volumen restante podría abastecer hasta 10 plantas de paneles tipo OSB, como la de Panguipulli, con insumos provenientes exclusivamente del crecimiento anual del bosque.
La oportunidad de una política forestal renovada
Carter insistió en que es momento de que las autoridades políticas y técnicas pongan atención al potencial de los renovales como una herramienta concreta para enfrentar la escasez de madera, impulsar la bioeconomía local y fomentar la descentralización.
“El país está frente a una situación compleja en abastecimiento, y aquí tenemos una alternativa viable, cercana a las comunidades, y que puede fortalecer tanto el empleo rural como la cadena forestal sustentable”, concluyó.
Con un recurso disponible, estudios de respaldo y cifras que muestran un potencial tangible, los bosques renovales se perfilan no como una opción futura, sino como una alternativa inmediata para el desarrollo forestal sostenible en Chile.
La entrevista completa en nuestro canal de YouTube:
